miércoles, 21 de octubre de 2009

Evidencia Grado IV: la propensión al Status Quo

Muy en relación con el Efecto Dotación, se da otro curioso "defecto conductual" en nuestro quehacer diario como profesionales sanitarios: se denomina tendencia al Status Quo.

Dicho efecto se manifiesta en la propensión a mantener nuestros propios criterios y formas de actuar contra viento y marea, e independientemente de la evidencia en contra (o la ausencia de ella).

Hemos visto cómo el Efecto Dotación nos puede llevar a sobrevalorar nuestros propios puntos de vista (opiniones, experiencia, conocimiento), lo cual unido a otros factores (pereza por la actualización de nuestros conocimientos, miedo a la pérdida y otros prejuicios cognitivos) refuerza nuestra tendencia a seguir comportándonos y tomando decisiones como habíamos estado haciendo hasta el momento. La tendencia al Status Quo puede ser lo suficientemente potente como para llegar a autoengañarnos o apoyarnos en la negación, con tal de "justificar" una determinada posición o decisión.

Existen ejemplos de la tendencia al Status Quo en nuestra vida diaria: no retirarse a tiempo tras una mala inversión económica a pesar de las pérdidas evidentes, no cambiar un objeto de lugar a pesar de impedirnos el paso una y otra vez, no cambiar de compañia de telefonía a pesar de una mejor oferta de la competencia...

La permanencia en nuestro particular Status Quo no debería ser malo en sí mismo: si una cosa está bien no tiene porqué cambiar. Pero hay escenas que nos son familiares, y representan una tendencia al Status Quo que perjudica a los pacientes:
  • El cirujano que no desea practicar una nueva técnica quirúrgica a pesar de haber demostrado menor tasa de complicaciones. Ejemplo: Intervenciones por mínima incisión.

  • El médico que no quiere prescribir una nueva medicación a pesar de ser más eficaz y/o con menor tasa de efectos adversos. Ejemplo: nuevos analgésicos.

  • El médico que asume formas de actuar del centro donde trabaja sólo porque "siempre se ha hecho así". Ejemplo: historial clínico no informatizado.

  • La prescripción "por inercia" de tratamientos que no mejoran la situación del paciente y/o perpetúan la saturación de un recurso sanitario. Ejemplo: "electro-placebos".

  • Los gimnasios de los Servicios de Rehabilitación donde el aparataje es el mismo que hace 3 décadas sin tener en cuenta el coste-efectividad de algunas nuevas tecnologías. Ejemplo: ruedas de hombro, jaulas de poleoterapia... en lugar de plataformas de fuerza y aparatos de isocinesia.

  • El "terapeuta" que aplica con fe y convicción casi religiosa una técnica demostradamente ineficaz o cuyos principios no están en sintonía con el conocimiento científico actual. Ejemplos: terapia craneo-sacral, osteopatía visceral...

De nuevo debemos estar alerta ante nuestro comportamiento, "nuestra evidencia grado IV" y los factores que distorsionan nuestra toma de decisiones con el paciente. ¿Es realmente válido el "más vale malo conocido que bueno por conocer"? Desde luego no, y menos aún si lo "bueno por conocer" ya está demostrado científicamente.

Bibliografía

1. Kay AC, Gaucher D, Peach JM. Inequality, discrimination, and the power of the status quo: Direct evidence for a motivation to see the way things are as the way they should be. J Pers Soc Psychol (2009); 97(3):421-34.

2. Salkeld G, Ryan M, Short L. The veil of experience: do consumers prefer what they know best? Health Econ (2000);9(3):267-70.

3 comentarios:

mmar dijo...

0 comentarios a esta entrada = esperanza 0
Cuando no se hace una lectura crítica de nuestro trabajo acabamos haciendo lo que han hecho nuestros "maestros": sobrevivir.
No generamos actividades de valor para los usuarios y así la Especialidad acabará languideciendo y muriendo por falta de contenidos.
Eso sí a nuestro alrededor creceran osteopatas y soplagaitas varios que se haran impotantes "personajes" tratando a incultos impresentables (y con la callada de las Universidades y/o foros de cultivo-cultura)

Unknown dijo...

Para vender un fármaco primero hay que probar que es seguro, después que es eficaz, y también que es mejor que otros fármacos. ¿Qué pasa con un método de electroterapia o un método de fisioterapia?


Esta decripción no sirve para todos los métodos y conceptos que se aplican en fisioterapia, pero sí para muchos de los más novedosos y otros tantos que cayeron en el olvido. Está exagerada pero allá vamos:

Para vender un método de fisioterapia o rehabilitación hace falta primero tener una idea novedosa como por ejemplo hacer masajes utilizando el palo de una escoba conectado a un TENS y unos imanes y untado de gel de ultrasonidos, eso sí, lo llamaremos rodillo biomiofasciomuscular y técnica analgésica electromiofascicularesonantemagnética, esta bien ser algo famoso, al menos en tu casa, y dar clases en una universidad, pero sobre todo tratando a futbolistas y famosos en una clínica privada o como médico-fisioterapeuta del equipo juvenil en el que jugaba Pelé; hay que escribir un libro con intuiciones, desvaríos e iluminaciones fisiopatológicas citando a muchos autores muertos de renombre, es interesante publicar algo en revistas sin revisión por pares, aunque esté medio inventado medio copiado y aunque la revista la hayamos financiado nosotros mismos y tenga una tirada de 10 ejemplares. Si eres el director y pagas la revista que publica tus artículos que nadie más acepta eres un jeta, no un autor de éxito. Después hay que hacer una web donde se explica algo del método. Si quieres ampliar tu clientela alternativa el método será holístico, si quieres parecer más listo dirás que está basado en estudios científicos que no tienes o has escrito tú en tu revista. Si pagas por un aula en una facultad de cualquier país podrás alquilarla y dar tu primer curso para 4 alumnos que son los que tienes contratado en tu clínica. Pero con eso ya has impartido un curso en la famosa universidad de Atlantia. Finalmente empiezas a organizar cursos hablando de los artículos publidados en tú revista sobre tú métido, los futbolistas famosos a los que has tratado, tus 20 años de experiencia y que una vez viste a Cyriax en un cursillo, sin olvidar tu infumable libro, agotado desde hace años ya que solo pagaste por los primeros 1000 ejemplares y la mitad los tienes en tu casa. Eso sí, das clases en una universidad y has pagado tú mismo cursos en otras muchas universidades. Poco a poco el método empieza a ser rentable con cursos breves de fin de semana y finalmente se llega a los 1000 euros de master de método tal o cualmiofascioresonanteenergétio, has reinventado toda la fisiopatología pero la comunidad científica no acepta nada porque "no están preparados o tienen intereses económicos", tienes cientos de testimonios de pacientes satisfechos y varios discípulos díscolos que hacen sus propias variaciones del método.

Hay medicina basada en la videncia. Medicina Basada en la autoridad, medicina basada en la conveniencia, medicina basada en la costumbre. En fin.

villovi dijo...

Me parece una muy buena entrada. Como dice un compañero, "en todos lados cuecen habas". Es muy cierto que parece que tenemos una tendencia natural al "Status Quo".

También es cierto que, por suerte, los tiempos cambian y parece que, aunque lentamente, avanzamos, progresamos, y la medicina basada en la evidencia va calando en todos y cada uno de los estamentos sanitarios.

Como fisioterapeuta entono el "mea culpa" que me corresponde. La universidad no ha hecho más que seguir con el modelo de trabajo que hace 25 años se inició en España, con pocos avances, y todos ellos basados en esa evidencia de grado IV, porque yo lo digo, porque a mi me va bien.

Hace poco tiempo unos compañeros acudieron a un congreso de fisioterapia sobre terapia manual y casi todas las ponencias tenían como referencia bibliográfica libros (y no demasiado actuales) de "importantes autores"...

Insisto en que esto esta cambiando. Han llegado nuevos aires a la fisioterapia (en el ámbito internacional), y cada vez existe más investigación, cada vez hay un mayor respaldo científico... intentamos trabajar de acuerdo a la fisioterapia basada en la evidencia (que es algo que ya existe).

Matasanos, friegaespaldas, electroadictos, pelagatos... existen (demasiados seguramente). En todos lados cuecen habas, insisto.

Enhorabuena por el blog. Un saludo.

Publicar un comentario